TRIP TO HEAVEN (Día 1)

Ya llevo cinco meses en Perú, parece ayer cuando me subía al avión David Bisbal para aterrizar en una oscura Lima llena de taxis, ruido, gente y frío, mucho frío.

Desde entonces ha llovido mucho.

Aprovechando mis vacaciones este fin de semana he estado en la sierra peruana, en estos días he perdido a una persona muy querida por mi, mi tía abuela Palmira, en la que en algún post ha participado por lo mucho que me reía con ella, era una mujer mayor con espíritu joven, me hubiera encantado poderle contar toda esta experiencia, me quedo con esa espinita pero sé que desde donde esté, ella va a ir conmigo.

Quedé con Yesus en Magdalena para irnos a la Gran Terminal Terrestre Plaza Norte que es desde donde nuestro autobús-cama salía camino a Huaraz, una ciudad de la sierra peruana, de ahí nos desplazaríamos a Carhuaz, el pueblo donde vivía su tía.
El motivo del viaje era que hacía seis meses a tía de Yes había fallecido y en el pueblo celebraban una misa para recordarla, ahí me estuvo contando como fue el entierro en el pueblo, no sabíamos que en unas horas íbamos a asistir a uno y lo viviría en mis propias carnes.

La gran terminal terrestre, a las afueras de Lima.

Íbamos a pasar toda la noche en ese bus cama, nos dieron algo de comer y nos pusieron ROCKY, nos quedamos sopinstant al momento.

Llegamos a las 6:00 a.m. a Huaraz, con legañas en los ojos y armados con nuestras maletas y mochilas nos montamos en un taxi camino a Carhuaz que está a 20 Km. de esta población.



Huaraz, 6:00 a.m. nuestro taxi es el que se ve acercándose.

 A medida que nos íbamos acercando, el camino se iba haciendo más abrupto, me preocupaba como iba a llevar mi maleta de ruedas por esos terrenos... De repente, una tremenda montaña helada apareció ante nosotros dándonos la bienvenida, el Monte Nevado Huascarán (la montaña mas alta del Perú), perteneciente a la Sierra Blanca, al otro lado, separada por el río Santa, estaba la Sierra Negra; ambas situadas en los Andes septentrionales.

El Huascarán, el monte nevado más alto del Perú nos daba la bienvenida camino a Carhuaz.

Llegamos a Carhuaz, un olor intenso a eucalipto (debido a la gran cantidad de eucaliptos que hay) me invadió, corría un aire fresco y se respiraba bien a pesar de estar a 3.000 y pico metros de altura, ahí nos encontró Chío, la prima de Yes. Fuimos a saludar a los familiares de Yesus, mama Toya y papa Peyo, dos ancianos encantadores que cocinan su propio pan en su casa para comercializarlo y consumirlo, el horno que tienen en casa aparece en un anuncio de Panettone que pasan por la televisión de aquí. Mama Toya nos preparó un huevo frito de gallina de corral con pan y nos ofrecieron una taza de café que me dio la vida.

Mama Toya cocinando el desayuno. Si os fijáis en el suelo están los cuys que más tarde iban a cocinar.

Huevo frito con café y pan casero.

Nos contó que un familiar había fallecido la noche anterior y que al día siguiente era el entierro. Con esa triste noticia nos fuimos de nuevo a casa de Chío para arreglarnos ya que la misa recordatoria de su tía se celebraba en unas horas. Yesus se reencontró con su mascota "Aventura" una coneja gordísima que serviría bien para un puchero...

La casa de Chío, donde, muy amablemente nos ofreció alojamiento.



Yesus con Aventura, su coneja.

Salimos hacia la iglesia de Ucuchá, nos subimos a un coche que pasaba por ahí y nos acercaron, ahí me llamó mi madre para darme la triste noticia de que mi tía abuela había fallecido, pensé en mi abuela y les dediqué la misa a ellas y les puse una vela.

Entrada a Carhuaz

Vistas de Carhuaz. Dos señoras ataviadas con el traje típico estaban mirando el panorama.

Iglesia de Ucuchá donde está el patrón de los desamparados.

Mama Toya saliendo de la misa de su hija. Ataviada con el traje típico de luto. Nunca sale sin su sombrero.

Tras la misa y bastante emocionado, nos dirigimos al cementerio para hacer la visita a la difunta, una vez ahí oraron y recordaron a la fallecida, había mucha gente, la mayoría ataviada con trajes típicos de la región.
En la entrada del cementerio hubo dos cosas que me llamaron la atención. La primera una escultura que parecía antigua, nadie me supo decir lo que significaba. Lo segundo, un cisne emanaba un chorro de agua que daba a una pequeña fuente, me comentaron que al salir del cementerio te tienes que pasar agua por la nuca para que ningún espíritu se fuera contigo.

Eso hice, no me apetecía llevarme de viaje a nadie a mis espaldas.

Entrada al cementerio, a la derecha de la imagen se puede ver la escultura misteriosa.

La fuente del cisne a la entrada interior del cementerio.

En un nicho habían colocado cerveza e Inka Cola ya que al difunto le gustaban mucho.

 Fuimos a una "bodega" (un bar pequeño, donde a parte de funciones de bar hace función de tienda), donde estuvimos bebiendo cerveza hasta la hora de comer. Aquí es tradición siempre que hay un memorial o un entierro beber cerveza para "celebrar" la marcha a un sitio mejor.
Un poco tocados nos fuimos a casa de Chío donde María había preparado Aka Cashqui (sopa de conejillo de indias) consistente en patatas, caldo de patatas, ají y cuy.
Escogí la parte en la que no había cabeza ya que se me hace muy raro comer mientras un conejillo de Indias me mira fijamente con los bigotes achicharrados. Estaba riquísimo, me lo acabé todo. lo mas rico son las patas que dicen que cuantas mas uñas tiene, mas rica es la carne y mas pedigree tiene el cuy.

Preparando el cuy, primero se degüella, luego se le quita el pelaje con agua hirviendo y finalmente se fríe.

Con la barriga llena y el "morro" caliente nos echamos una siesta ya que estábamos agotados del largo viaje que habíamos hecho.

Al despertar, aunque eran las 18:30, ya era de noche (aquí es primavera y aun con todo a las 19:00 siempre ya es de noche). Decidimos acercarnos con Chío y Yes a la piedra del diablo (SUPE JKALKA), donde dicen que si echas agua en la roca se aparece la silueta del diablo. Nos armamos con una botella de agua y nos dirigimos a la plaza de Armas de Carhuaz, ahí compramos una cremolada de piña (helado cremoso, riquísimo) en un puestecillo de los que hay ahí.

Justo al lado estaba el paradero de los MOTOTAXIS unas motos muy tuning que hacen servicio de taxi. Fue como subir a un todoterreno, la moto se desplazaba con 4 personas por un terreno sin asfaltar con rocas, baches, charcos, arroyuelos... sin ningún tipo de problema hasta que llegamos justo a la entrada del sendero donde el mototaxista nos abandonó.

Foto de un mototaxi, para que os hagáis a una idea.

Era casi de noche y estabamos a la entrada de un sendero muy a lo BLAIR WITCH PROJECT, nos adentramos en una especie de bosque de arboles de eucalipto altísimos que llegaban hasta el cielo y caminando un rato llegamos a un claro donde en medio había una piedra inmensa.

Escrito en grafitti rezaba la frase: PELIGRO y una estrella de cinco puntas, Chío me indicó la zona donde echar el agua y eso hice. Lo que apareció fue una cosa espectacular, una especie de demonio tribal con la cabeza redonda tallado en la roca y con las manos abiertas. Dicen que hace años, un cura persiguiendo al diablo lo empujó contra la roca y por eso aparece así.

La piedra del diablo, si os fijáis la cara esta en la parte superior de la fotografía (es redonda) y ya siguiendo hacia abajo se aprecia la anatomía de lo que dicen que es el diablo.

Un poco impactados y rodeados de arboles decidimos hacernos fotos con la esperanza puesta de que apareciera algo después en ellas pero nada.. caminamos de vuelta al pueblo pasando por un maizal donde me metí para hacer un poco el tonto, una vez dentro no me gustó nada la idea de perderme tan cerca de la piedra...

Hambrientos, volvimos a la plaza de armas de Carhuaz para sentarnos en un puestecillo donde comimos lo que iba a ser la cena de todos los días: pollo broaster hecho en el momento. Riquisimo.
El plato consiste en pollo rebozado muy crujiente con un poquito de ensalada y unas pocas patatas fritas, todo super casero.

De ahí ya nos fuimos a casa ya que al día siguiente queríamos madrugar para caminar un poco y a parte nos sentíamos cansados. Me acosté con mi abuela y mi tía abuela en la mente.

El día siguiente fue muy emocionante pero eso lo dejo para otra entrada.